Hace un par de semanas tuve la oportunidad de visitar el Monasterio de Santa María la Real en Aguilar de Campoo. Fue mucho más que una visita, de esas en que entras y te vas sin haber aprendido nada y sobretodo sin haber sentido nada. Gracias al guía turístico, fue un viaje fascinante a través del arte. Arquitectura y la historia medieval de esta zona de España.
Fundado en el siglo IX, aunque su documentación más sólida comienza en el siglo XI, el monasterio cuenta con una rica historia ligada a la Reconquista y a la consolidación del cristianismo en la península ibérica.
Desde sus inicios, el monasterio fue un centro espiritual y cultural protegido por la nobleza y la realeza, quienes contribuyeron a su riqueza y esplendor. Fue construido principalmente entre los siglos XII y XIII, en un momento de transición artística del románico al gótico, lo que se refleja en la mezcla de estilos arquitectónicos y decorativos que se pueden admirar durante la visita.
El claustro cisterciense, me impresiono tantísimo, es un lugar donde se podrían pasar horas admiranto todos sus detalles, como sus bellisimos capiteles tallados en piedra que muestran motivos animales y vegetales. Es sin duda una joya del arte románico, aunque en el ya es posible ver algunos detalles de un inminente influencia gótica.











La iglesia del monasterio, es mucho más grande de lo que me habia imaginado, es una verdadera basílica de tres naves, con esa sobriedad que tienen los antiguos edificios de piedra y a mi tanto me gusta. En una de sus naves se puede admitar una interesante colección de sarcófagos.






Otros detalles:





Normalmente el tur termina con la visita a la iglesia después de lo cual es posible ver un maravilloso espectáculo, donde con luces proyectadas en el abside, te cuentan toda la historia de la abadía desde sus orígenes, su decadencia y como resurgió después de los maravillosos restauros que la salvaron de su completa destrucción y que hoy nos permiten admirar esta maravilla joya arquitectonica.

Recomiendo fervientemente la visita, no solo por su valor artístico, sino también para entender la importancia de los monasterios en la historia medieval española y su legado duradero en la cultura actual.
Además, el monasterio ha sabido adaptarse a los tiempos modernos y hoy alberga no solo la sede de la Fundación Santa María la Real, que impulsa la conservación y difusión del patrimonio, sino que sirve como sede de la Escuela de Idiomas de Aguilar y la UNED.
Este uso compartido que integra el patrimonio a las actividades de la vida diaria de la comunidad local es sin duda el mejor medio para garantizar su futuro.




