En Venezia es muy común encontrar edificios que tienen algunas puertas o ventanas cerradas con ladrillos, donde se puede ver claramente la silueta de se vieja estructura.

El motivo es normalmente simple, la remodelación del edificio por motivos estructurales o simplemente cosméticos.
En el caso de este edificio ubicado al frente del campo Santa Giustina, creo que sin duda la vieja ventana gótica era mucho más bonita de las «nuevas».





