Como siempre digo, una de las cosas especiales de Venezia es que basta leer el nombre de sus calles para que nuestra mente vuelve y trate de imaginar como fue la vida en ese lugar…


Una curiosidad: La producción del pan en Venezia estaba organizada en dos asociaciones llamadas «arte», una de las cuales incluía las personas que preparaban la masa y otra que agrupaba los propietarios de los hornos que cocinaban y vendían el pan.




